El álbum infantil es uno de los géneros editoriales que más me han interesado a lo largo del último año; tanto es así que en semanas recientes incluso me he animado a convertirme yo mismo en incipiente coleccionista. Así, detrás de mi petición a quien es conocido por su apodo de Pávido Návido, hay un interés personal. Extiendo los beneficios de la consulta que acabo de hacerle a los amigos que se asoman a este blog.
10 álbumes infantiles
Selección y comentarios de Luis Téllez-Tejeda
Quizá sea la
obra
que
inaugura
el
género
del
libro
álbum.
Publicado
originalmente
en
1963, muestra los poderes
de
la
imaginación,
lo
cual
no
cayó
muy
bien
a
quienes
gustan
que
los
libros
para
niños
contengan
moralejas
y
enseñanzas
evidentes.
Una historia contada
a
varias
voces,
mejor
dicho,
a
varias
vistas.
Browne
es
uno
de
los
genios
del
libro
álbum,
y
en
esta
obra
juega
con
los
puntos
de
vista
de
cada
personaje,
logrando
que
la
imaginación
del
lector-espectador
se
desborde.
La sencillez, bien
mirada,
muchas
veces
da
paso
a
lo
poético.
Elbruch
logra
una
hermosa
y
conmovedora
alegoría
sobre
la
muerte
que,
paradójicamente,
llena
de
vida
a
los
lectores.
Probablemente la obra
maestra
de
Javier
Sáez
sea El
animalario universal
del Profesor Revillod,
pero
en
este
libro
-en el cual
las
ilustraciones
lindan
con
la
pintura-
alcanza
al
surrealismo
e
invita
al
lector
de
cualquier
edad
a
perderse
en
los
bosques
de
lo
soñado.
Ni los niños
ni
sus
libros
tienen
porqué
ser
preciosos,
tampoco
las
historias
de
princesas
deben
estar
llenas
de
habitaciones
alfombradas
y
satines.
Isol
hace
que
los
lectores
se
cuestionen
sobre
en
dónde
está
realmente
la
belleza,
con
humor,
claro.
Las letras, originalmente,
fueron
dibujos,
Magallanes
invierte
esta
idea
y
para
jugar
a
transformar
en
objetos
a
las
letras
y
construir
una
historia.
Un
álbum
divertido
que
disfrutan
quienes
saben
leer
y
quienes
aún
no
lo
hacen.
El mar es
uno
de
los
tópicos
recurrentes
del
arte,
en
este
libro
Suzy
Lee
entrega
una
historia
llena
de
alegría
que
hará
que
el
lector
tenga
vuelva
a
su
mirada
prístina
del
océano.
Otro
álbum
que
basa
su
grandeza
en
la
sencillez.
Uno podría elegir
cualquier
libro
de
Ungerer
al
azar
y
encontraría
una
moderna
fábula
con
la
cual
morir
de
risa
y
revivir
para
leerlo
otra
vez.
En
esta
obra,
Ungerer
hace
una
historia
de
enredos
a
lo
Groucho
Marx.
Una tranquila canción
de
cuna,
por
la
que
desfilan
distintos
animales,
contrasta
con
la
intensidad
de
las
ilustraciones
que
abren
paso
al
espectador
a
lo
más
arriesgado
de
la
pintura
contemporánea.
Pacovska
cree
que
el
libro
álbum
debe
ser
como
un
pequeño
museo
donde
los
niños
tengan
una
experiencia
estética
de
primera
mano,
y
lo
logra
en
cada
una
de
sus
obras.
Los autores de
libro
álbum
han
logrado
traducir
visualmente
la
narrativa
textual,
en
este
libro
Shulevitz
da
forma
a
una
retahíla
tradicional
ubicándola
para
romper
la
rutinaria
monotonía
de
una
ciudad
gris
y
muestra
cómo
los
pequeños
detalles
son
importantes
para
dotar
de
significado
a
un
álbum.
–––––––––––––––––––––––
Tomo el retrato de Luis Téllez-Tejeda de la página http://bit.ly/2v96JLx, donde se ofrece sin
crédito de autoría.
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